Una base clave de cultura humana se encuentra en el medio alimentario. La cocina local de cada zona se caracteriza por la utilización racional de los productos «kilómetro 0» o también conocidos: productos de temporada y de la zona.
Productos frescos locales
La cocina local es uno de los grandes atractivos turísticos y una de las señas de identidad más atractivas para experimentar en los viajes. Gastronomía y alimentación local de temporada, son los elementos básicos de toda una cultura, añadidos a los productos frescos y conservas locales.
También, sin dejar de hablar de paladar: los vinos, el jamón, las olivas, el pan, el queso… que son elementos alimentarios completos de carácter local en cada sitio. Y, claro está: frutas, verduras y hortalizas del lugar sin olvidarnos de una de nuestras señas identificativas de calidad: AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra).